martes, 29 de diciembre de 2009

Un antiguo barco romano naufragado transportaba salsa de pescado

Una nave naufragada del siglo uno que transportaba manjares para los más ricos paladares del Imperio Romano ha demostrado ser un descubrimiento sorprendente, ya que contiene ánforas de arcilla con espinas de pescado de casi 2 mil años de antigüedad, aseguraron arqueólogos españoles el pasado lunes.

Unos pescadores hallaron un cargamento de centenares de ánforas en el año 2000, cuando su ancla se enganchó en uno de los recipientes de doble asa.

Tras años de planificar los gastos y la tripulación, en julio de 2006 empezó la exploración de un enclave situado a 1,61 kms de distancia de la costa de Alicante, en el sureste de España, afirmó Carles de Juan, codirector del proyecto y que trabaja para el gobierno valenciano.

El barco, que mide unos 30 metros de largo y tiene una capacidad de 400 toneladas de cargamento, dobla en tamaño a la mayoría de navíos romanos naufragados y hallados en el mediterráneo, dijo De Juan en una entrevista concedida a la Asociación de Prensa.

El cargamento de, aproximadamente, 1500 ánforas de arcilla bien conservadas se utilizó, en este caso, para guardar salsa de pescado, un preciado condimento de los romanos adinerados, afirmó De Juan.

Durante 2 mil años, las ánforas, que miden 91,44 cms de alto, permanecieron intactas, salvo algunas abiertas por pulpos que rompieron los sellos de argamasa y cerámica en busca de comida o cobijo.

Aparte del tamaño del barco y la buena conservación del cargamento, el emplazamiento es importante también por su fácil acceso, ya que se encuentra a sólo 24 ms de profundidad y a 1,61 kms, aproximadamente, de la costa. Algunos naufragios están a tanta profundidad que los buceadores no pueden examinarlos.

"No es que estuviera en la playa, pero casi", dijo De Juan, uno de los primeros buceadores en investigar el naufragio en el 2000. "Sabíamos que era importante, pero ahora sabemos cuánto", dijo. "Es un descubrimiento excepcional".

La última vez que apareció un barco tan grande y de tan bien conservado fue en 1985, cerca de Córcega, dijo.

Javier Nieto, director del Centro de Arquelogía Submarina de Cataluña, aunque no participó en el proyecto, afirmó también que era inmensamente importante debido al buen estado del cargamento. Actualmente, no hay ningún otro naufragio en estudio en el mediterráneo, dijo.

"Para los arqueólogos, un barco hundido es como un documento histórico que nos habla de la historia antigua y del funcionamiento de su economía", dijo Nieto desde Barcelona. "Este barco es una gran contribución".

El barco probablemente se hundió durante una tormenta mientras viajaba de Roma a Cádiz, al sur de lo que hoy es España. La tempestad debió de ser feroz, ya que era extraño que un navío de estas características pasara tan cerca de la costa.

"A la tripulación no le importaba el cargamento o el dinero. Se dirigieron a tierra para salvar sus vidas", dijo De Juan.

De Juan y el otro codirector del proyecto, Franca Cibercchini, de la universidad de Pisa (Italia), presentaron su primer informe de la localización del barco la semana pasada, durante una conferencia sobre arqueología marina en la población de Gandía, cerca de Valencia.

Cuando corrió la voz acerca del hallazgo en el 2000, buceadores piratas asaltaron el lugar y robaron algunas ánforas, lo que forzó al gobierno de Valencia a construir una reja que cubriera los restos y protegiese los recipientes.

Lo restos de la estructura de madera del barco (un 60 por ciento), está sepultado bajo el lodo en el fondo del mar.

Es probable que haya plomo en el cargamento, usado por los romanos en fontanería, y cobre, el cual mezclaban con estaño para fabricar bronce, que servía para fabricar todo tipo de cosa: desde platos hasta joyas.

Ya no queda salsa de pescado en las ánforas, ya que los sellos no eran herméticos y no pudieron conservarse durante 20 siglos bajo el agua. Pero en su interior hay restos de espinas de pescado y éstos ayudarán a los investigadores a determinar cómo se elaboraba la salsa de pescado, dijo De Juan.